viernes, 25 de marzo de 2011

MI AMIGO... MI ANGEL

Cuanto tiempo sin saber nada de ti, no tenia forma de ponerme en contacto contigo, no hay cartero que lleve mi carta, no hay teléfono que marque tu número, tu correo ya no responde, no hay escalera tan alta que llegue a ti, así que solo me queda escribir en este espacio y desear con fuerza que de alguna manera vuele a ti .
No contestaste a mi último correo y ya no pudimos hablar más, ¿porqué te fuiste?¿porqué después de tantas horas de conversación no te despediste de mi? Te llamé para saber de ti, y se derrumbó todo mi mundo, fui a verte, no te pude tocar, ni darte un abrazo, solo te vi a trabes de aquellos cristales lleno de cables …. Días más tarde recibí una llamada que cambió mi estado de ánimo, cambió mi vida. Siempre tuve la esperanza de que ocurriera un milagro y te curaras, nunca llegué a creer que llegara el final. Tú lo sabías, se que sí, y siempre dando ánimos a los demás … Luchaste hasta el final , de lo que estoy muy orgullosa , eres un ejemplo a seguir. Aquella tarde dejaste este mundo para ir con las estrellas.
Te echo mucho de menos, no sabes cuanto.
Recuerdo aquellos ratos en el árbol, bajo la sombra, pasamos muchas horas allí. Recuerdo aquella noche que me presentaste a tu “loquita”, fue una noche inolvidable, pensé que ya no sería lo mismo, pensé que te distanciarías de mi y nunca lo hiciste. Siempre te lo he agradecido y siempre lo haré.
Doy gracias por pasar aquella tarde por aquella calle, doy gracias por aquel impulso que me dio por acercarme a ti, doy gracias por haberte conocido. Has sido una gran persona, un gran amigo, has hecho de hermano mayor, siempre he valorado mucho tus consejos y tus regaños, me has dado el apoyo que necesité en difíciles momentos, has sido un verdadero ángel.
En el último correo te conté que había retomado el contacto con un antiguo compañero, que tenía un contacto especial, gracias a él ahora puedo escribirte y sé que de algún modo tu has tenido algo que ver. Tú desde otro mundo has llenado de magia esta relación, ahora es el mi mejor apoyo, le cuento lo sola que me encuentro y lo difícil que es seguir adelante sin poder escribirte, sin poder contar contigo.
La gente me dice que todo pasará, que el tiempo lo cura todo, yo pienso que no es así, que solo hay que aprender a vivir con ello. No sé si hago bien en hacer esto de escribir, pero es un intento para sentirme algo mejor. No sabes lo que daría por volver a verte, por volver a sentir aquellos abrazos … que siempre iban acompañados de tristezas y lágrimas, pero eran tan sinceros que nos ayudaban a seguir adelante. Siempre tengo una caricia de mi marido, un beso de mi hija, un abrazo de mi familia y amigos, pero faltas tú.
Hay días que me despierto y no lo creo, pienso que ha sido todo una pesadilla, pero después de unos segundos vuelvo a la realidad, y se que no estás, se que te has ido y no volverás
Sé que de algún modo, este mensaje llegará a ti y cuando lo haga te abrazará tan fuerte que te hará sentir el cariño que aquí te tenemos.
Como un buen amigo me dijo “no sufras por lo que podías haber hecho sino disfruta de lo que has vivido”, así que con esto es con lo que me quedo de nuestra amistad.
Ha sido una buena historia pero me hubiera gustado otro final, me hubiera gustado llegar a viejecitos y juntarnos en aquel árbol y que me contaras tus cosas, las anécdotas de tus nietos …. Ahora sé que no podrá ser. Cuando vaya, se que no vendrás, se que me sentaré sola, pero de algún modo sé que estarás allí para cuidar de mí.
Siempre estarás de alguna manera especial dentro de mi, nunca podré olvidarte, nunca podré olvidar a un verdadero ángel.

Dedicado a un verdadero ángel que luchó con todo su ser y fue derrotado contra la guerra llamada leucemia.